POLÍTICA Y RELIGIÓN. María de la Válgoma
No, no voy a hablar de la relación, casi siempre conflictiva, entre ambas, sino de cada una por separado y de como con los años se va perdiendo la ingenuidad juvenil. Yo estaba persuadida de que había políticos, me gustaran a mi o no, que querían el bien de la gente, del país. ¿Como pensar, por ejemplo, que, a Don Manuel Fraga, que se le llenaba la boca con la palabra España, no le iba a importar lo que fuera bueno para su país? España había entrado en la OTAN en mayo de 1982 con el Gobierno de Calvo Sotelo. Unos meses antes, yo había participado en una manifestación, con pancartas que decían: “OTAN, no, bases fuera”, el eslogan más coreado, y en esa manifestación estaba Felipe González, que nos sacaría de la Alianza militar,( aunque el eslogan del PSOE era bastante absurdo: “OTAN de entrada, no”). Cuando en 1986 se plantea el Referéndum, sobre la permanencia de España en el Organismo, con los socialistas en el poder, la postura de éstos ya había cambiado. Pero Fraga, en lugar de recr